Hasta hace relativamente poco, la mayoría de fotos se realizaban mediante cámaras con carretes fotográficos que nos daban como resultado una fotografía impresa que acababa, con un poco de suerte, ocupando sitio en la estantería archivadas en un álbum.
Pero por fortuna, el avance de las tecnologías ha hecho innecesario tal acción, ya que en la actualidad, salvo los más veteranos de la profesión quizás, la mayor parte de las fotografías se toman con cámaras digitales que hacen innecesario el uso del papel fotográfico.
Pese a todo, y aunque tengamos cientos de fotos, la utilidad de un álbum digital salta a la vista. Con el evitaremos que nuestras fotos acaben en sitios que no debieron estar, además de facilitarse un soporte desde el que se puede reproducir de forma elegante y ordenada todo nuestro material fotográfico.
Con ese fin encontramos plataformas como la Hoffman, un programa de maquetación que destaca por la sencillez de su manejo, sin sacrificio de la potencia, con el que podremos desarrollar todo tipo de ideas para la elaboración de nuestro álbum digital.
Pese a todo se pueden adquirir muchos otros programas para este fin ya que desde que apareciera la fotografía digital, la cantidad de lugares destinadas al retoque grafico se han disparado, posibilitando que cualquier persona interesada en el mundo de la fotografía pueda obtener tomas tan validas como las de los mejores fotógrafos.
Además si combinamos el empleo de este tipo de software con el empleo de un marco digital, podremos disfrutar de un excelente trabajo fotográfico sin necesidad de tocar una sola página del álbum de fotos