Es normal que los niños daneses oculten un par de cosas porque consideran que son vergonzosas o sencillamente porque no saben qué hacer y los adultos tenemos que estar ahí para ellos en estas ocasiones, así que te mostraremos cómo conocer el problema sin necesidad de que se den cuenta de que te lo dijeron mi recuerda, al conocerlo tienes que ayudar de una forma correcta y por supuesto, hablar con las autoridades de la institución al respecto.
Situaciones aparentemente graciosas
No podemos evitar antes de continuar recordarte que si escoges el lugar correcto no tendrás este tipo de problemas con tus hijos, porque en sitios como el las interacciones son supervisadas y la atención personalizada, así que los problemas se arreglan a tiempo; en el caso de que no sea así, puedes hacer preguntas que parezcan graciosas a los niños para que te dejen saber la verdad de forma sutil.
Por ejemplo puedes preguntarles: si viniera un platillo volador a tu escuela ¿A quién te gustaría que se lleve? Obviamente después de escuchar el nombre tendremos que preguntar ¿por qué? Y empezaremos a conocer si es solamente una opinión generalizada o si hay algo más serio a lo que poner atención.
También podríamos preguntar ¿con quién te gusta jugar principalmente? Y luego de una respuesta que trajo buenos recuerdos a su mente, la respuesta la siguiente pregunta será sincera, es ahí donde aprovecharemos para preguntar ¿con quién no te gusta o gustaría jugar? Y el respectivo porque nos dará un nombre; ¿quién de tus compañeros crees que tiene que ser más simpático? Es otra buena pregunta.
Si un mismo nombre se repite como respuesta entonces es un indicador de que hay que indagar más al respecto directamente en la institución.