Aproximadamente un total de 100.000 personas se someten a tratamientos para poder procrear en España

Actualmente, en torno al 17%, aproximadamente un millón, de las parejas en edad fértil tienen problemas para concebir un hijo; y tan solo alrededor de 100.000 se somete a un tratamientos como la fecundación in vitro o la inseminación artificial.

En España hay un total de 217 centros especializados en este tipo de asistencia, de los cuales 180 son privados y 37 son públicos. Los profesionales del sector niegan la falsa creencia de que los tratamientos de fertilidad sean un lujo, considerando además que es dicha asistencia tendría que dejar tratada como enfermedad.

La ginecóloga Laura Cortés Laguna, asegura que cada vez más las personas afectadas por este tipo de anomalías recurren a especialistas. Además asegura que el no someterse a este tipo de tratamiento sí que puede derivar en trastornos psicoemocionales ante la imposibilidad de poder procrear.

Cada vez más hay más mujeres que rondando los 37 años de edad no tienen pareja y desean ser madres, por lo que acudir a uno de estos centros es una gran solución. En Cataluña el número de mujeres que solicitan esta asistencia se ha triplicado en los últimos diez años, según los datos de la Consejería de Salud, donde además se refleja que la mitad de estas pacientes son procedentes de países extranjeros como Francia, Reino Unido e Italia, puesto que la legislatura española en cuanto a reproducción, donación de óvulos y semen es más avanzada que en sus países; sobre todo para las parejas homosexuales.

Además, los costes en los centros españoles son más bajos que en el extranjero, oscilando entre los 1.000 y 6.000 euros. Muchas parejas no solicitan estos tratamientos por no poderlos costear, sin embargo, hay líneas de financiación para que todas las personas puedan acceder al derecho de ser padres. Otro factor por el que no acuden es por la prolongación en el tiempo que supone someterse a esta asistencia en los centros públicos, ya que las listas de espera suelen oscilar entre los seis meses y los tres años.

 

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